PRISMÁTICO
ESPEJO
Las ardientes
pupilas, noche solar,
Bebiendo
las hieles que me traces
Con tus
risas irónicas y voraces,
La marcha
se moldando en vacuidad.
Desde
anteayer he podido presumir
Los desenredos
mortales en tus labios,
Besando
eso cadáver que tramaste
En la
podrida imagen de un amor;
Paseando
por las lejanas calles
De una
pequeña villa, ilusión…
Me percibo
en confusas afluencias
De tiempos
remplazados por farsas inauditas.
Escucho
el latido de un insano corazón
Marcando
en descompaso
Las trémulas
figuras que me has dado,
Un torbellino
gigantesco
En los
remolinos constantes hasta el mar.
Las orillas
inundadas de la esperanza estúpida,
Son lo
retrato más fiel
De un
pesadillo vivo, reflejado
En el
prismático espejo de mí alma…
MARCOS
LOURES
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