Morbilidad
Sé que mi camino está el fin,
Es por eso que descargo en este soneto
Que son los versos del vacío adonde me apuro,
Intentando una flor en un jardín estéril.
La muerte me acecha, dice que sí,
Los errores tan frecuentes día a día,
Fundamentalmente, resta muy poco tiempo, pero prometo que,
Más gradualmente terminaré mis pasos.
Tuvo la oportunidad de soñar
Vagando por las miles de estrellas, las nebulosas,
Las horas tan sutiles y delicadas,
En una firme esperanza, falso embarque.
Pero sé que, al final, no soy nada,
Carne podrida y rota...
Marcos Loures
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